viernes, 27 de enero de 2012

La educación es el camino



Esto es parte de un mail que me envió Ana y creo que merece ser compartido:
PARA PENSAR:

 Ustedes saben mejor que nadie que en el conocimiento y la cultura  no sólo hay esfuerzo sino también  placer.

 
Dicen  que la gente que trota por la rambla, llega un punto en el que  entra
 en una  especie de éxtasis donde ya no existe el cansancio y sólo le queda  el placer.

 
Creo  que con el conocimiento y la cultura pasa lo mismo. Llega un  punto  donde  estudiar, o investigar, o aprender, ya no es un esfuerzo y es  puro disfrute.

 
¡Qué  bueno sería que estos manjares estuvieran a disposición de mucha  gente!

 
Qué  bueno sería, si en la canasta de la calidad de la vida que el  Uruguay  puede  ofrecer a su gente, hubiera una buena cantidad de  consumos intelectuales.

 
No  porque sea elegante sino porque es  placentero.

Porque  se disfruta, con la misma intensidad con la que se puede  disfrutar  un plato de  tallarines.

¡No  hay una lista obligatoria de las cosas que nos hacen  felices!

 
Algunos  pueden pensar que el mundo ideal es un lugar repleto de  shopping  centers.

 
En  ese mundo la gente es feliz porque todos pueden salir llenos de  bolsas  de ropa  nueva y de cajas de electrodomésticos. 
No  tengo nada contra esa visión, sólo digo que no es la única  posible.

Digo  que también podemos pensar en un país donde la gente elige  arreglar  las cosas en lugar de tirarlas, elige un auto chico en lugar de un  auto grande, elige abrigarse en  lugar de subir la calefacción.

 
Despilfarrar no es lo que hacen las sociedades más maduras. Vayan a  Holanda  y vean las ciudades repletas de bicicletas. Allí se van a dar cuenta de que el consumismo no es la  elección de la verdadera aristocracia de la humanidad. Es la elección  de los noveleros y los frívolos.

 
Los  holandeses andan en bicicleta, las usan para ir a trabajar pero  también para ir a los  conciertos o a los parques.

 
Porque han llegado a un nivel en el que su felicidad cotidiana se alimenta  tanto de  consumos materiales como intelectuales.
 

 
Así  que amigos, vayan y contagien el placer por el  conocimiento.


En  paralelo, mi modesta contribución va a ser tratar de que los  uruguayos  anden  de bicicleteada en bicicleteada.
 

 
LA  EDUCACIÓN ES EL CAMINO
.

 
Y  amigos, el puente entre este hoy y ese mañana que queremos tiene  un  nombre y se  llama educación.

 
Y  miren que es un puente largo y difícil de  cruzar.  
Pero  hay que hacerlo.  

Se lo debemos a nuestros hijos y nietos.
 
Y  hay que hacerlo ahora, cuando todavía está fresco el milagro  tecnológico de Internet y se abren  oportunidades nunca vistas de acceso al conocimiento.

Yo  me crié con la radio, vi nacer la televisión, después la televisión  en  colores,  después las transmisiones por satélite.

Después  resultó que en mi televisor aparecían cuarenta canales, incluidos los que trasmitían en directo desde Estados Unidos, España e Italia.

 
Después  los celulares y después la computadora, que al principio  sólo  servía para  procesar números.
 Cada una de esas veces, me quedé con la boca  abierta.
Pero ahora con Internet se me agotó la capacidad de  sorpresa.

 
Me siento como aquellos humanos que vieron una rueda por primera  vez.

O como los que vieron el fuego por primera vez.

 
Uno siente que le tocó en suerte vivir un hito en la  historia.

Se están abriendo las puertas de todas las bibliotecas y de todos los  museos; van a  estar a disposición, todas las revistas científicas y todos los libros del  mundo.

Y probablemente todas las películas y todas las músicas del mundo.
Es abrumador.
Por eso necesitamos que todos los uruguayos y sobre todo los uruguayitos sepan nadar en ese torrente.

Hay que subirse a esa corriente y navegar en ella como pez en el agua.

Lo conseguiremos si está sólida esa matriz intelectual de la que hablábamos antes.

Si nuestros chiquilines saben razonar en orden y saben hacerse las preguntas que valen la pena.

Es como una carrera en dos pistas, allá arriba en el mundo el océano de información, acá abajo preparándonos para la navegación trasatlántica.

Escuelas de tiempo completo, facultades en el interior, enseñanza terciaria masificada.

Y probablemente, inglés desde el preescolar en la enseñanza pública.

Porque el inglés no es el idioma que hablan los yanquis, es el idioma con el que los chinos se entienden con el mundo.
 
No podemos estar afuera. No podemos dejar afuera a nuestros chiquilines.

Esas son las herramientas que nos habilitan a interactuar con la explosión universal del conocimiento.
 Este mundo nuevo no nos simplifica la vida, nos la complica...
 Nos obliga a ir más lejos y más hondo en la educación.
No hay tarea más grande delante de nosotros.

 José Mujica  (Presidente de Uruguay)

¡Gracias, Ana! 

A BOCA DE JARRO 

Buscar este blog

A boca de jarro

A boca de jarro
Escritura terapéutica por alma en reparación.

Vasija de barro

Vasija de barro

Archivo del Blog

Archivos del blog por mes de publicación


¡Abriéndole las ventanas a la realidad!

"La verdad espera que los ojos
no estén nublados por el anhelo."

Global site tag

Powered By Blogger