¡Cuidado!
No hay nada más letal y peligroso
que una mujer a punto de cumplir cincuenta,
una mujer que sin sus gafas de lectura
ve aumentado su deseo sin vergüenza,
ya no le basta que le hagas el amor en una cama
y es muy capaz de incendiar de desenfado tu bañera.
No tientes, no incites al pecado original,
a una mujer que ya es cincuentenaria,
ya no existe el pecado para ella,
el pecado sería que te la pierdas:
si la invitás a comer una manzana,
más te vale reservar la caja entera...
Nunca lleves de paseo en tu coche
a una mujer de camino a la cincuentena:
secretamente y, sólo por un rato,
ella esperará que le conviertas
el asiento trasero en hotel alojamiento,
y agarrate del volante si intentás, con palabras, darle vueltas.
Una mujer que ya ha vivido medio siglo
tiene un fuego parecido al de una hoguera:
posee un ardor de inmensa llama
hecho de un femenino altamente inflamable,
y es seguro que con su calor, cual hoguera,
te alimente, te celebre y de placer te mate.
Al estrenar su quinta década
es probable que una mujer prescinda de tu espejo
y con el de ella ya dialogue amablemente:
con el paso de los años, ha descubierto
que la llave de todos los espejos
está en la risa piadosa de aquello que nos muestran.
Una mujer que ya ha vivido medio siglo
tiene un fuego parecido al de una hoguera:
posee un ardor de inmensa llama
hecho de un femenino altamente inflamable,
y es seguro que con su calor, cual hoguera,
te alimente, te celebre y de placer te mate.
Al estrenar su quinta década
es probable que una mujer prescinda de tu espejo
y con el de ella ya dialogue amablemente:
con el paso de los años, ha descubierto
que la llave de todos los espejos
está en la risa piadosa de aquello que nos muestran.
Más allá de la curva de salida de la vida
una mujer siente que no hay quien la detenga,
ha dejado atrás el hambre de quedarse con las ganas,
la tiranía de la imagen, el qué dirán, las apariencias,
y ha conquistado la tierra de su sexo en su esencia
al desafiar, con risa, todo lo que de ella aún se espera.
una mujer siente que no hay quien la detenga,
ha dejado atrás el hambre de quedarse con las ganas,
la tiranía de la imagen, el qué dirán, las apariencias,
y ha conquistado la tierra de su sexo en su esencia
al desafiar, con risa, todo lo que de ella aún se espera.
A boca de jarro
Siempre interesante ....
ResponderBorrarMuchísimas gracias, Mark.
BorrarUn abrazo.
Fer
¡Cuidado Fer! Porque me ha encantado, ;)
ResponderBorrarVi la película de algunas de las imágenes hace poco tiempo, y no existe mejor elección que Meryl Streep para tus letras.
Simpáticas, sinceras y sin censura.
Besos, :)
Yo creo que Meryl Streep es la mejor actriz viva, y un excelente referente para las que vamos irremediablemente hacia los cincuenta. Muchas gracias, Irene ;)!
BorrarBesos.
Fer
¡Genial post! Hace muchos años que escuché esta frase: una mujer de 20 puede resultar atractiva, una de 30 seductora, y una de 40 o más, irresistible, ¿por qué no vamos a creer que es así? ;-)
ResponderBorrarLas imágenes me han hecho mucha gracia, sobre todo la del piececito.
Besos, y que tengas buen día, Fer
Me divierto como loca buscando imágenes que me inspiren a escribir o que peguen con lo que se me va ocurriendo. Muchas gracias, Chelo ;)!
BorrarUn beso grande!
Fer
Un poema con mucha vitalidad. Enhorabuena.
ResponderBorrarUn abrazo
Muchas gracias, María.
BorrarUn abrazo!
Fer
Una mujer interesante da lo mismo la edad que tenga, el atractivo físico es una capa de barniz en algunas,en otras su risa o simpatía las enaltece como féminas seductoras y muy apetecibles.
ResponderBorrarBesos compañera.
Ojalá todo el mundo pensara así, mi querido Francisco. En general, me parece, sentimos que al hacernos grandes nos tornamos invisibles: hay un endiosamiento de la juventud que resulta ya casi intoxicante. La realidad es que yo, como mujer, me siento más libre y más feliz conmigo misma ahora que enfilo para los cincuenta, y desde ese sentir que me potencia es que escribo.
BorrarUn beso grande y muchas gracias!
Fer
Y al borde de los sesenta? Animosas, seguras de su yo físico y mental, llenas de vida y dando amor y razones a los que nos rodean. En fin, no tenemos desperdicio... jajaja!
ResponderBorrarBesos, Fer
Desde luego, querida Josela ;)!
BorrarBesos y gracias por tus risas cómplices ;)!
Fer
Muy bueno Fer, así es como tenemos que tomarnos la vida, sentirse especial y a partir de los cincuenta imparables!!!
ResponderBorrarUn besazo amiga
mafar
Imparables, tú lo has dicho ;)!
BorrarBesos mil y muchas gracias, mi queridísima Mafar ;)!!!
Fer
Maria Paz, hoy nos traes un post genial, muy bueno,y a partir de los cincuenta somos robles. mi felicitación.
ResponderBorrarGracias por tu compañía.
Abrazos grandes.
Gracias a ti por visitarme, querida Carmen ;)!
BorrarAbrazos!
Fer
¡Genial esta declaración de guerra! ja,ja,ja Porque estoy de acuerdo también en que es la edad perfecta para mandar a la porra un montón de estupideces previas a los cincuenta.
ResponderBorrarUna estrofa final que subrayo y copio porque es magnífica:
Más allá de la curva de salida de la vida
una mujer siente que no hay quien la detenga,
ha dejado atrás el hambre de quedarse con las ganas,
la tiranía de la imagen, el qué dirán, las apariencias,
y ha conquistado la tierra de su sexo en su esencia
al desafiar, con risa, todo lo que de ella aún se espera.
No sé, Fer, si has tenido la oportunidad de ver Ricki (una de sus últimas películas), atreviéndose con todo un nuevo reto – una cantante y guitarrista de hard rock (que interpreta cantando y tocando la guitarra en directo). Tiene también su parte romántica. ¡Te la recomiendo!
Un abrazo enorme.
No me pierdo ninguna de sus películas. La admiro profundamente y me inspira ;)!
BorrarMuchísimas gracias, querida Estrella! Abrazote!
Fer
Qué gran verdad... Me encantó leerte y descubrir o recordar mi momento de fumar la pipa de la paz con la del espejo.
ResponderBorrarBesos, bonita.
Me alegra mucho haberte hecho recordar tan grato momento en la vida de cualquier mujer ;)! Yo te cuento que no hace mucho que empecé a fumar de esa pipa, y realmente me ha cambiado la vida. Muchísimas gracias!!!
BorrarBesos.
Fer
Brillante poema. Si se extiende a lo mejor conseguimos que terminos como cuarenton@s y cincuenton@s se conviertan en cuarentañer@s y cincuentañer@s. Saludos!
ResponderBorrarMil gracias, David.
BorrarUn abrazo!
Fer
Fer me encanta ser una cincuentona...o cicuentañera como ahora se intenta imponer...
ResponderBorrares verdad que yo que ya he transitado la mitad del camino de esta década, puedo afirmar que es una buena edad porque es cuando aprendes a quererte, a ponerte en primer plano, a ponerte "el mundo por montera" como diríamos por aqui...se acabaron los complejos, total no sirven para nada,y si a alguien no le gusta pues le dices chau y listo...
La madurez no implica esconderse, si no dejarse ver tal cual eres...
Tu lo has dicho mas bonito...porque tu prosa fluye sin miedos...ojala que la realidad sea la que describes en el texto...
Por cierto me encanta Meryl
Un abrazo
Trabajo con mi realidad mucho más que con mis versos para que fluya sin ocultarse, sin complejos y sin miedos, mi querida Julia ;)!
BorrarMuchas gracias y un abrazo!
Fer
La crisis de los 50 tan falsa de sentido como las crisis anteriores y las que luego siguen. Todas ellas son necesarias para el etiquetaje de las personas en compartimentos estancos y hacerlas más suceptibles y vulnerables a las trampas del consumismo atroz que constituye al parecer la parte más trascendente de nuestras vidas.
ResponderBorrarTodo falso, pero en este caso te ha permitido hacer un texto bello y conmovido, lleno de ilusión y hasta con cierto desenfado.
Besos
Crisis no es más que cambio, y es la regla de la vida. Lo que sí me parece es que hay momentos en la vida cuando el cambio se hace más notorio, y que aciertas en que hay cambios socialmente aceptados, y otros, muchos, denostados. Escribo al filo de mi propio cambio, ya sin filtro, y le doy la bienvenida.
BorrarMuchas gracias, Krapp! Un beso grande!
Fer
Como experta en la materia (ya tengo cincuenta) creo que estoy suficiente capacitada para opinar.
ResponderBorrarA estas alturas estoy de vuelta de todo. Nunca fui muy convencional, pero ahora es que me importa un bledo "el qué dirán" y me gusta más llevar el coche a que me lleven.
Bonito poema, Fer. Muy ilustrativo.
Un beso.
Me encanta la imagen que utilizas como experta: ya prescindes de chofer. ¡Maravilloso!
BorrarMuchísimas gracias!
Un beso, Paloma.
Fer
Qué bueno que una escritora lo publique así, con franqueza, desenfado y buen gusto. Por cierto, en este post hay sólo verdades. ¡Me encantó! Yo... que no tengo pensado envejecer.... por muy añosa que llegue a ser....imaginate, querida María Paz, no puedo menos que enamorarme de estas letras.
ResponderBorrarBesitos.
Me reconforta y me alienta el hecho de que de alguna manera te sientas identificada, Egle. Muchísimas gracias por tus palabras!
BorrarBesos.
Fer
Hace mucho tiempo que sé de las virtudes y encantos de las mujeres cincuentonas. Me encanta que lo confirmes y que mejores, si cabe, el buen concepto y la admiración que siento por estas mujeres, Por las otras, también, pero es diferente.
ResponderBorrarAbrazos, Fer
Otro día me explicas cómo es diferente, Luis Antonio ;)! Muchísimas gracias.
BorrarUn abrazo.
Fer
Me sentí avasallado gratamente por la potencia del poema. Sin reparos, con una vitalidad sorprendente, unas ganas de vivir sin fijarse en arrugas ni espejos, fuera del circuito de las convenciones, derrumbando barreras, esta mujer cincuentona se encuentra pasando por la mejor etapa de la vida, y lo mejor de todo es que está plenamente convencida de ello, para felicidad de muchos hombres. Para resumir, un mensaje vital para que todas aquellas que están “en situación” arriesguen, que la vida vale la pena, que los cincuenta es solo un número, que suelten la niña que llevan dentro y la pongan al volante para conducir hacia lo que serán los mejores recuerdos del mañana. Brillante Fer.
ResponderBorrarUn beso.
Ariel
Muchísimas gracias, Ariel: no te llamo más "Raúl", disculpame por haberlo hecho sin saber. A mí me pasa que me llaman "María" y no me siento nombrada, por eso aclaro entre comillas ;)!
BorrarUn beso!
Fer
Letras e imágenes en perfecta consonancia para reflejar una desenfadada realidad, y también, en cierto modo, un alegato a la libertad y a ciertas verdades que a veces todos saben pero nadie comenta. Cómo me ha gustado, Fer, ese toquecito travieso de tu post. ¡Brindo por las mujeres de cincuenta que están ya por encima de tantas cosas y que ahora saben, mejor que nunca y desde la experiencia, disfrutar de la vida!
ResponderBorrarUn texto genial, querida amiga. Has hecho que desee que pasen rápido los tres añitos que me quedan para los cincuenta jajajjaa.
¡Un beso grande de lunes!
Brindo contigo ;)! Muchísimas gracias, mi querida y admirada Julia!!!
BorrarBesos.
Fer
Qué bueno Fer, me ha encantado la combinación que has hecho de letras e imágenes.
ResponderBorrarEn un mundo en que parece que se tiene que ser siempre joven, me parece fantástico reivindicar la libertad de hacer lo que se quiera cuando se quiera y eso es algo que da la edad.
Un beso
Muchas gracias, Conxita. Coincido plenamente contigo respecto del deseo de reivindicar la edad que casi tengo ;)!
BorrarUn beso.
Fer