Hay días en los que arde magia,
en los que llueve alegría,
en los que la vida emana
su claridad meridiana
y se me florece su mejor profecía.
Hay días en los que atisbo
la luz en mi propio abismo,
en los que todo es promesa,
en los que siento certeza,
días que libran la piedra.
Hay días en los que tus manos
crean un teclado
y tocan para mí
aquella melodía
que sabía mía.
Días en los que camino a ritmo.
Días que se me hacen cluecos
pero de los huevos
de empollar los versos
dentro de mi pecho.
Días en los que me río
del revés del reino,
en los que no freno
si me pega el viento,
días de alto vuelo.
A boca de jarro
Días que se me hacen cluecos
ResponderBorrarpero de los huevos
de empollar los versos
dentro de mi pecho.
Precioso todo el poema...
Mi felicitación por tu buen hacer.
Feliz martes María Paz.
¡Carmen! Qué gusto tenerte por aquí. Te agradezco mucho tu visita y tus cálidas palabras.
BorrarFeliz día para ti también.
Fer
Puéssí que un bonito poema, precioso. Gracias por compartirlo.
ResponderBorrarEs un gusto compartir mi trabajo. Muy amable, Pilar.
BorrarUn cordial saludo.
Fer
Me ha encantado todo cada palabra, cada verso...
ResponderBorrarUn besote
Me alegro mucho que te guste.
BorrarUn beso y todo mi agradecimiento.
Fer
Maravillosos esos días que libran la piedra. Un abrazo, María Paz.
ResponderBorrarPues sí que lo son, Alfredo. Me honra tu visita, poeta. Mi agradecimiento y mi admiración de siempre.
BorrarUn abrazo.
Fer
Hermosos, vivaces así son hoy tus versos. besicos.
ResponderBorrarMe alegra que así te parezcan, Marijose. Muchas gracias por tu amable visita. Besos.
BorrarFer
Preciosos versos Fer!!! Necesito un poco de esa magia.
ResponderBorrarBesos
Durante largos meses deseé que esa magia se vendiera en las farmacias y en frasquitos, será por eso que ahora, cuando tocan esos días, los celebro así, mi querida Marybel, sobre todo porque he logrado vivirlos sin esas cosas redondas y blancas que solía comprar en las farmacias para soportar los días y soportarme a mí misma durante aquellos meses...
BorrarUn beso grande y muchas gracias.
Fer
Hermoso poema!!
ResponderBorrarHay días en los que arde magia,
en los que llueve alegría,
en los que la vida emana
su claridad meridiana
y se me florece su mejor profecía.
De estos son los que ultimamente necesito una buena ración.
Besossss Fer!!
Ojalá pudiese convidarte un buen tazón, María Antonia, pero ya te he dicho que hacía tiempo que mis brebajes sabían todos amargos, así es que se puede ;)!
BorrarUn beso enorme y muchas gracias!!
Fer
Dias de voo alto...
ResponderBorrarQue se acabam na promessa de outro, que provavelmente virá.
Mais quente ou mais frio, e que se acaba de novo prometendo!
Que seus dias sejam cada dia melhores, assim, como seus poemas que dão enorme gostos de lewr!
Abraço!
Sou grato por seus bons desejos, seus palavras e sua visita ao blog.
BorrarAbraço, poeta!
Fer
Después de la tormenta siempre sale el sol. Y además el sol está por encima de las nubes. Esta reflexión me hacía concebir esperanza en mis épocas de hundimiento y simas. Por ejemplo, este día que nos traes aquí en que luce el sol para el corazón sensible. Que haya muchos como este. Me alegro contigo.
ResponderBorrarUn beso.
Lo sé, Joselu, sé que te alegras conmigo. Y lo agradezco.
BorrarUn beso.
Fer
Hay días en los que atisbo
ResponderBorrarla luz en mi propio abismo,
en los que todo es promesa,
en los que siento certeza,
días que libran la piedra.
Me ha gustado cada palabra, cada verso... y desde antes, deseo q esa Luz jamás te falte.
Un abrazo inundado de ternura para un corazón tierno y sensible como el tuyo.
Mi Alma te sigue sonriendo.
Me alegra mucho que te guste. Te sonríe mi alma también y te agradece.
BorrarUn beso.
Fer